Los devotos del Señor de los Milagros provienen de muchos lugares del país y del extranjero, como una inmensa fraternidad espiritual. Para todos ellos, cobrar una Agudeza del Señor es sentirse en la obligación de reconocer y de hacer el aceptablemente a los demás.Señor, yo deseo seguirte a donde tus pasos me lleven, deseo que mi corazón sea